TARTAS TRADICIONALES

Llamamos tartas tradicionales a aquellas que nos han acompañado desde pequeños y que consideramos parte de nuestra gastronomía.

Las tartas tradicionales son tan variadas que unificarlas en imposible. Depende del gusto de cada persona para decantarse por alguna en particular. De frutas, de crema, de chocolate, de nata o de cualquier otro sabor, suelen ser tartas ancestrales que nos remonta a algún lugar.

Seguramente todos tendremos una en mente que nos gusta más: tartaletas, tarta San Marcos, Tatín, bizcochos, brownies, tartas de frutas, y miles más.

Las tartas tradicionales puede decirse que no son tan “bonitas” o decoradas como las que vemos en una boda, cumpleaños, bautizo o cualquier otro evento. Son por el contrario, quizá más ricas en sabor y contextura, que en esta estética. Suelen ser por naturaleza: muy muy buenas.

Una diferencia primordial entre las tartas tradicionales y las “decoradas” (por llamarla de una manera), es que en las segundas, y de hace un tiempo para acá, se utiliza el fondant. El fondant es esa pasta de azúcar, que puede ser de varios colores, que le da un estilo de “forro” a la tarta. Además con el fondant se pueden crear formas que le dan un estilo y elegancia a las tartas.

En muchos países, el uso de fondant en la decoración de tartas es normal, mientras que en otros, como España, es poco frecuente.

Considero que depende del evento y del gusto de las personas, hay tartas para todo. Sobre todo porque es difícil no quedar bien con un buen trozo de una deliciosa tarta. Contacta a Pistoria y dinos, ¿qué tarta tradicional quieres?